
Justificación
El uso de las benzodiazepinas se recomienda no alargarlo más de 4 meses, para trastornos del sueño y para el tratamiento de la ansiedad en pacientes depresivos. Tras haber comprobado que cerca del 90% de los pacientes tratados con benzodiazepinas en trabajos anteriores, las usan durante más de 6 meses y el 80% durante más de un año, surge la necesidad de establecer un protocolo de deshabituación al uso de las benzodiazepinas.
Objetivos
Desarrollar un protocolo de actuación entre farmacias comunitarias y centros de atención primaria para la detección de pacientes en tratamientos largos con benzodiazepinas y su deshabituación.
Poner en marcha el protocolo y evaluar el impacto que podría tener, así como las dificultades que se establecen.
Metodología
Durante los meses de enero y febrero de 2019, en el acto de dispensación en farmacia comunitaria se actúa según un protocolo de detección de tratamientos con benzodiazepinas que se prolongan más de 6 meses de los pacientes pertenecientes a los médicos colaboradores en el estudio. A estos pacientes se les ofrece información sobre el abuso de las benzodiazepinas y sus efectos a largo plazo, además de los beneficios de abandonar su tratamiento, si es posible. Se oferta la opción de participar en el estudio piloto llevado por médico y farmacéutico.
Siguiendo el protocolo del estudio, si procede, se comienza una deshabituación del uso de benzodiazepinas, por prescripción médica. Durante el proceso de reducción de dosis, se le realizan seguimientos semanales en consulta farmacéutica, evaluando la abstinencia, y la evolución de su problema de sueño o ansiedad, para, si fuese necesario, derivar a consulta médica.
Resultados
De 14 pacientes incluidos, 8 de ellos (57%) llevaban en tratamiento con benzodiazepinas durante más de 6 meses y 2 (15%) durante más de un año. 4 pacientes abandonaron el estudio por no acudir a alguna de las sesiones de seguimiento de médico o farmacéutico.
De los restantes, 8 (66%) al cabo de 4 meses lograron abandonar el uso de benzodiazepinas.
Conclusiones
La colaboración médico-farmacéutico logra una mejor detección de los pacientes, un mejor seguimiento y control durante la cesación.