JUSTIFICACIÓN: el ojo seco es el más común de los desórdenes que afectan a la parte anterior del ojo. La utilización de medicamentos como tranquilizantes, antidepresivos, somníferos, anticonceptivos, diuréticos, descongestivos, antihistamínicos, antiglaucomatosos, anticolinérgicos o hipocolesterolémico pueden producir ojo seco. El desconocimiento de este riesgo asociado puede pasar desapercibido, ocasionando molestias oculares y ocasionalmente patología. Puntuaciones >20 pueden indicar sequedad ocular.
OBJETIVOS: determinar subjetivamente la incidencia de pacientes con ojo seco no diagnosticados que estén en tratamiento con fármacos que puedan provocarlo.
MATERIAL Y MÉTODO: la muestra estará compuesta por todos los pacientes que acudan a la farmacia comunitaria y que tengan prescrito algún medicamento que pudiera producir ojo seco. Se formó adecuadamente al personal de la farmacia para poder entrevistar a los pacientes. Se utilizó el test de McMonnies de forma anónima para determinar subjetivamente la incidencia de ojo seco.
RESULTADOS: durante el tiempo de estudio acudieron a la farmacia comunitaria 1.432 pacientes, de los cuales, 346 utilizaban medicamentos que podían producir ojo seco (24,16 %). De nuestra muestra, 36 no realizaron el test (13 %), 143 obtuvieron una puntuación >20 (41,33 %), 155 obtuvieron una puntuación <20 (44,80 %) y 3 ya estaban diagnosticados y en tratamiento (0,87 %).
CONCLUSIONES: existe un alto porcentaje de pacientes con molestia y sequedad ocular que no han sido diagnosticados y por tanto no están siendo tratados. La falta en un adecuado diagnóstico y pronto tratamiento del ojo seco puede ocasionar daño del tejido ocular, particularmente en la córnea. Los pacientes no le dan excesiva importancia a este tipo de molestias, por lo que no acuden a las consultas ante la presencia de esta alteración, acudiendo cuando el mal es ya mayor. Sería recomendable la realización de alguna campaña sanitaria para la concienciación de la población en el cuidado de la salud ocular a fin de conseguir un diagnóstico precoz y un tratamiento eficaz impidiendo la aparición de complicaciones. Tanto desde farmacias comunitarias como desde los gabinetes de óptica y optometría se podrían realizar este tipo de campañas sanitarias, realizando así una gran labor social.