JUSTIFICACIÓN: la comprensión lectora del prospecto es crucial, pues contiene todas las informaciones indispensables para su correcto empleo, así como una invitación expresa a ser leído. Es necesario identificar oportunidades para que el material educativo que recibe el paciente sea lo más comprensible posible para garantizar la administración segura. Los pictogramas farmacéuticos pretenden comunicar mensajes complejos, independientemente del nivel educativo.
OBJETIVOS: revisar la evidencia disponible sobre la eficacia comunicativa de los pictogramas farmacéuticos.
MATERIAL Y MÉTODOS: se realizó una búsqueda sistemática en paralelo de la literatura publicada en los últimos 20 años. Las bases de datos consultadas fueron Scopus, PubMed y Web of Science. Las palabras clave empleadas fueron: adherence, compliance, “consumer health information”, “health literacy”, “health education”, pictograms, “illustrated leaflet” y “visual aid”. Solo se incluyeron artículos en inglés que consistieran en estudios controlados aleatorizados como estándar oro para la evidencia. La búsqueda arrojó 207 resultados. Tras la eliminación de duplicados y lectura de títulos y resúmenes se seleccionaron 13 artículos que se ajustaban a nuestro objetivo.
RESULTADOS: Sudáfrica, con 5, es el país que más estudios controlados aleatorizados realizó según nuestros criterios de búsqueda. Sus autores remarcaron la importancia de asegurar la comprensión de instrucciones escritas sobre medicamentos en un entorno con tasas de analfabetismo elevadas. Solo 2 estudios realizaron tests de Alfabetización en Salud complementarios. 4 estudios no hallaron diferencias significativas en la comprensión entre grupo control y el de intervención, pero la aceptación del pictograma por el paciente fue generalizada en todos los estudios identificados.
CONCLUSIONES: la inclusión de pictogramas podría ser una estrategia económica y sencilla con potencial en la educación del paciente, no obstante, no ha sido todavía suficientemente explorada en nuestro entorno.