PRESENTACIÓN: mujer de 30 años, con depresiones recurrentes y antecedentes familiares cercanos de diabetes mellitus tipo I y tipo II. Tratamiento: escitalopram 20 mg (1-0-0), lorazepam 1 mg (1-1-1), mirtazapina 30 mg (0-0-1), alprazolam 2 mg (según crisis).
RAZÓN DE CONSULTA: acude una tarde al servicio de seguimiento farmacoterapéutico (SFT) de nuestra farmacia preocupada y nos comenta que lleva padeciendo desde hace varias semanas los siguientes síntomas: aumento del número y cantidad de micciones diarias (poliuria) y aumento de sed (polidipsia). Nos indica que tiene antecedentes familiares de diabetes y que esos eran los síntomas principales de sus familiares cuando les diagnosticaron la diabetes. Esto le preocupa mucho a la paciente, por la posibilidad de que ella padezca también esta enfermedad siendo tan joven.
VALORACIÓN E INTERVENCIÓN: citamos a la paciente al día siguiente por la mañana y en ayunas para realizarle un control de glucosa en sangre con un dispositivo preparado para ello (Servicio de Determinación de parámetros analíticos de nuestra farmacia). El valor de glucosa obtenido en dicha prueba es de 90 mg/mL, el cual está dentro de la normalidad. Para profundizar un poco más, se revisa su medicación, comprobando que en su tratamiento hay un número considerable de benzodiazepinas, que como efecto secundario pueden producir sequedad de boca. Se sospecha que ésta pueda ser la causa del aumento de sed, la mayor ingesta de líquidos y el mayor aumento, por tanto, del número y cantidad de micciones diarias. Se remite un informe detallado al médico explicando los síntomas y las preocupaciones de la paciente y solicitando que confirme los valores de normalidad de glucosa detectados con una prueba más exacta, como es la hemoglobina glicosilada.
RESULTADO: el médico valora positivamente nuestro informe y realiza dicha prueba analítica a la paciente, obteniendo un valor de hemoglobina glicosilada de 4,8 por ciento, que también se encuentra dentro de lo normal, reforzando las sospechas que teníamos en el servicio de SFT de nuestra farmacia. La paciente nos comunica los resultados, sintiéndose realmente aliviada y agradeciendo nuestra gran labor en su caso. Una vez descartado que padeciese diabetes, le indicamos soluciones para su problema de sequedad de boca, como el uso de chicles o enjuagues bucales. Nos comenta muy satisfecha que: "hemos conseguido devolverle la tranquilidad en su vida diaria".
CONCLUSIONES: el seguimiento realizado a esta paciente ha sido capaz no sólo de solucionar sus dudas y miedos, sino también de reforzar nuestro papel como farmacéuticos asistenciales.