Importancia del servicio de seguimiento farmacoterapéutico en pacientes atendidos por varios especialistas

PRESENTACIÓN: mujer de 78 años en seguimiento farmacoterapéutico. Acude a nuestra farmacia preocupada porque la lengua se le ha puesto negra. Preguntamos si ha habido cambios recientes en su medicación y nos explica que le han diagnosticado recientemente Helicobacter pylori y le han pautado un tratamiento: omeprazol 20 mg (1-0-1), amoxicilina 1 g (1-0-1), claritromicina 500 mg (1-0-1), metronidazol 250 mg (2-0-2). Revisamos medicación habitual: acenocumarol 4 mg (S/P). Tratamiento fibrilación auricular: carvedilol 6,25 mg (1-0-1). Cardiopatía: valsartán 160 mg (1-0-0). Tratamiento HTA: amlodipino 5 mg (0-0-1). Tratamiento HTA: observamos que lo que le preocupa, coloración negra de la lengua, podría ser un efecto adverso asociado a los antibióticos recientemente pautados. Además, vemos que hay descritas interacciones entre acenocumarol 4 mg y la terapia que le han prescrito para el tratamiento del nuevo problema de salud. La paciente explica que la medicación para Helicobacter pylori se la ha prescrito el especialista de digestivo de su sociedad médica y que no lo ha puesto en conocimiento de su MAP por no considerarlo un cambio relevante.

DESARROLLO: en primer lugar, optamos por tranquilizar a la paciente explicándole que probablemente lo que le preocupa sea un efecto adverso de los antibióticos que está tomando, y que este problema de salud remitirá espontáneamente a medida que la flora de la cavidad oral se vaya restituyendo. Por otro lado, explicamos la importancia de que acuda a su centro de salud, donde controlan su INR y le explique a su MAP el problema de salud diagnosticado y el reciente tratamiento. Le hacemos ver que sería conveniente monitorizar de manera más frecuente su INR, debido a las interacciones que se han generado con el tratamiento del Helicobacter pylori, ya que este se puede ver alterado, con el riesgo que esto supone para su salud. Realizamos un informe por escrito donde notificamos al médico de cabecera lo que hemos explicado verbalmente a la paciente.

RESULTADO: la paciente vuelve al servicio de seguimiento farmacoterapéutico y nos cuenta que su MAP confirma la sospecha de efecto adverso. El médico adelanta el control de acenocumarol, obteniendo un valor de INR 8. Ajustan la dosis y la citan para controles más frecuentes conforme establece el protocolo hasta que INR quede controlado. Como conclusión, el servicio de seguimiento farmacoterapéutico hace posible la detección de este tipo de situaciones, donde queda de manifiesto la escasa comunicación entre los distintos especialistas.